La salud y correcto estado del aparato reproductor es un factor fundamental para el bienestar de la mujer. La vagina está colonizada por diversos microorganismos. El equilibrio de las poblaciones de estas bacterias así como la ausencia de grupos patógenos, resulta fundamental para mantener la salud y el correcto funcionamiento del aparato reproductivo. El 75% de las mujeres sufren infecciones vaginales al menos una vez en la vida y en más de un 30% de los casos de mujeres que muestran infertilidad o fallos de implantación repetitivo se encuentran microorganismos patógenos en el aparato reproductor. De esta manera, desequilibrios en la composición de las poblaciones o bajos niveles de representación de ciertos grupos, propician infecciones oportunistas que causan alto grado de malestar y disminuyen las probabilidades de conseguir un embarazo. ¿Qué es la microbiota de la vagina? La microbiota de la vagina hace referencia a los diversos grupos de bacterias que encontramos en la misma, y de cuyo equilibrio depende el correcto estado de salud y funcionamiento del aparato reproductor femenino.
¿Qué es?
Es un test que permite estudiar las microbiota presente en vagina. Con sólo 1 prueba obtenida de forma indolora en la consulta del ginecólogo, somo capaces de informar acerca de la composición de las fundamentales poblaciones de bacterias que indican el estado de equilibrio de la vagina, al mismo tiempo que estudiamos la posible presencia de grupos patógenos asociados a procesos infecciosos que pueden provocar fallos de implantación repetitivos y fracaso en el establecimiento y mantenimiento del embarazo.
Con este test aportamos información relevante para la consideración de homeostasis o alteración de la flora bacteriana vaginal: Abundancia relativa del género Lactobacillus sp. así como la composición de las especies de este género presentes en la muestra (Lactobacillus iners, Lactobacillus crispatus, Lactobacillus gasseri, etc. ) Al mismo tiempo, estudiamos la posible presencia de bacterias disbióticas o patógenas del tracto reproductor femenino que han sido relacionadas con condiciones de infertilidad, fallos de implantación repetitivos, fallos en el mantenimiento del embarazo y endometritis crónica (Atopobium, Prevotella, Bifidobacterium, Sneathia, Shigella, Gardnerella, Streptococcus, Enterococcus, Staphylococcus, Escherichia, Klebsiella, Neisseria, Chlamydia, Ureoplasma y Mycoplasma).